El primer paso es programar una consulta con un abogado especializado en responsabilidad por productos. Durante esta reunión, discutirás los detalles de tu caso, incluyendo cualquier daño causado por la fórmula infantil, las pruebas que tengas (como registros médicos o empaques del producto) y las posibles estrategias legales. Nuestro equipo evaluará la viabilidad de tu caso y explicará tus opciones legales, incluyendo la probabilidad de éxito y la posible compensación.